jueves, 12 de septiembre de 2013

Sergio Melnick y Hermógenes Pérez de Arce, dos artículos imperdibles...



Sergio Melnick y Hermógenes Pérez de Arce dos colosos en la defensa de la verdad nuestra historia reciente y de los valores de nuestra Patria.




¿Somos un país o dos en permanente conflicto?,

por Sergio Melnick


Una fecha como ésta no se puede obviar, es mandatorio referirse a ella. Pero hay dos alternativas posibles para hacerlo: una es seguir alimentando el odio y los rencores de lo que pasó desde hace 50 años o más, mostrando todo lo mal que lo hicieron siempre sólo los del otro bando. Es lo que ocurre hasta el día de hoy, y, esgrimidos todos los argumentos en ambas direcciones, nadie convence a nadie. Realmente nadie escucha a nadie. La otra, es tratar de encontrar una veta para avanzar como país. Dicen los maestros que si uno quiere cambiar al mundo, entonces uno debe cambiar primero. En Chile siempre queremos que sea el otro el que cambie. Nos victimizamos responsabilizando al otro de nuestras desgracias. Quizá hayan influido, pero desde la posición de víctima jamás se progresa, ya que se necesita o espera que el otro haga algo que me resuelva mi situación, y eso, aunque lo haga, nunca resuelve realmente “mi” problema. Peor aún, queremos que el otro asuma todas las culpas, se humille y se auto-responsabilice de todas las desgracias que nos acontecen y le acontecen a la nación. Es la lógica de las polaridades, del blanco y negro excluyentes, la semilla de la guerra.


La sabiduría es poder ver la unidad en la dualidad, y es lejos el recurso más necesario para el desarrollo y la conquista de libertad fundamental que aspiramos los humanos, y probablemente es el atributo más escaso en nuestro país. Somos aún sólo los nuevos ricos del barrio, pero no somos desarrollados ni estamos cerca. El verdadero desarrollo está en la mente de las personas, no en los objetos. En nuestro país, el pasado nos divide y eso es así probablemente desde nuestro mismo origen como nación, y simplemente no hemos sido capaces de evolucionar. Carecemos de sabiduría básica y no hacemos ningún esfuerzo por cultivarla. Somos eminentemente autodestructivos. Tuvimos guerra civil, y no aprendimos. Tuvimos una guerra irregular en los ’70 y tampoco aprendimos. Llevamos tres Constituciones y la queremos cambiar. Estamos llenos de resentimiento, y en muchos casos de odio. El odio nunca engendra nada positivo. Seguimos peleándonos como perros y gatos pensando que sólo unos son buenos y los otros son malos. Sólo los más ideologizados y recalcitrantes pueden reivindicar un Gobierno desastroso como el de la UP, o pensar que las dictaduras pueden ser benevolentes y desconocer las aberraciones que éstas engendran. Esa es la lógica del blanco y negro, pero la realidad social es siempre de grises, ya que donde hay seres humanos hay subjetividad, hay emociones, hay ideas, creencias, historia, ideología.


Las historias de los países son siempre difíciles, y para qué hablar de la humanidad. Las guerras mundiales del siglo 20 fueron horrorosas, no obstante Europa siguió adelante, sin olvidar su historia, y avanzando decididamente. También lo hizo EE.UU. después de su guerra civil y tantos ejemplos. De la historia hay que aprender y recordarla, pero no nos podemos quedar pegados en la guerra interna para siempre. Peor aún, mi propia generación, que no fue capaz de resolver el drama de los ’70, se lo está pasando cobardemente, como una mochila insoportable, a las generaciones jóvenes, que repiten consignas que escuchan de los mayores, muy lejanas a la experiencia vivida. Colegios tomados el día 11 por niñitos de 15 años en memoria del golpe tienen poco o ningún sentido. Escuchar los discursos actuales de los ahora viejotes ex líderes del MIR y de Patria y Libertad es simplemente patético; no han evolucionado un milímetro. Peor aún, son las caricaturas de la historia; “todo es culpa de la CIA” o “todos son comunistas vendidos” ayuda bien poco.


Chile es uno, todos somos parte de ese todo y entre todos lo debemos construir. O nos reconciliamos de una vez o terminaremos nuevamente en una guerra civil. Del odio nunca nace nada constructivo. La responsabilidad de la historia es colectiva, serena, profunda y no sólo de un grupo u otro. Y si queremos perdones, éstos deben ser constructivos, necesariamente simultáneos, y mirando al futuro; de otra manera es sólo venganza, revancha, humillación, evasión u otros, y eso nada resuelve ya que mantiene los resentimientos para siempre. La UP destruyó al país, no puede caber duda. El Gobierno militar, a su vez, cometió abusos inaceptables. La discusión de si se pudo haber hecho esto o lo otro en uno u otro momento, claramente no lleva a nada, porque no cambia lo que ocurrió, y sólo conduce a que un lado pueda tratar de justificar espuriamente lo malo que es el otro. El tango, amigos, sólo se baila de a dos.


No se trata de olvidar el pasado, se trata de superarlo, de entenderlo, de aprender, y de cambiar que es lo único relevante, además de reparar aquello que sea reparable. La pregunta hoy es si usted está entre los que quieren tratar de unir o los que quieren seguir en la confrontación infinita que sólo tiene mal pronóstico.


Porque no quiero que la historia se vuelva a repetir, y porque coincido absolutamente con la propuesta del Presidente Piñera, yo opto por tratar de unir.


Ataque Europeo en Masa,
por Hermógenes Pérez de Arce.


En la primera mitad de los años '80 leí en un diario la información de que exiliados chilenos en Suecia habían hecho una colecta en beneficio del FPMR, asociación ilícita terrorista que era (y a lo mejor es, "por si las moscas") el brazo armado del Partido Comunista, y que a esa colecta callejera había contribuido el entonces Primer Ministro sueco Olof Palme. Eso lo leí, quedó grabado en mi mente y sólo me retractaré si un Subdirector de Investigaciones comunista como Carlos Toro me amenaza con aplicarme electricidad en mis partes más sensibles como la que le aplicó al Presidente de la Juventud Nacional en enero de 1972. Pero como hasta ahora la única tortura que he sufrido es que la Embajadora de Suecia escribió a "El Mostrador" que lo que yo afirmo es falso, y ese tormento lo puedo soportar perfectamente, porque estoy seguro de lo que leí hace treinta años, sigo reafirmando que el cable informó que Olof Palme hizo una donación en una colecta en beneficio del FPMR. En un terreno menos seguro podría aventurar que la información apareció ilustrada con una fotografía en que un desafiante Palme aparecía entregando, con su brazo derecho alzado, su óbolo a los exiliados. Pero de esto último no estoy muy seguro.


La Embajadora sueca se llama Eva Zetterberg y escribió una carta bastante odiosa a "El Mostrador" acusándome de falsedad. Pero como yo sé lo que leí, aunque nadie me crea, tengo mi conciencia tranquila. Ella dice que es falso que Palme contribuyó a la colecta. Yo leí en el diario que lo hizo. Yo podría irme a "El Mercurio" y empezar a leer diarios desde febrero de 1986, en que asesinaron a Palme, hacia atrás. En ese tiempo no había internet, tendría que ir diario por diario. ¿Y si salió en otro diario? Bueno, no lo voy a hacer, pero yo estoy seguro de que apareció. A lo mejor un comentarista de este blog lo encuentra o también lo recuerda.


La Embajadora se enoja porque yo implícitamente acuso a su Gobierno de haber ayudado al terrorismo cuando acá había Gobierno Militar. Pero está probado que su Gobierno ayudaba al terrorismo: cuando estaba flameando la bandera sueca en la Embajada de Cuba en Santiago, Max Marambio, que había sido GAP de Allende, ha revelado que todas las armas que había en la Embajada, que eran bastantes, fueron transferidas al MIR. Y la Embajada estaba bajo la responsabilidad sueca. El Embajador era un notorio izquierdista llamado Harald Edelstam. Piñera le diría que, por lo menos, fue un "cómplice pasivo", lo cual es una contradicción en los términos, pero esas sutilezas no le importan a Piñera.


Así es que no necesito que sea verdad que Olof Palme contribuyó a la colecta en favor del FPMR para decir que los suecos ayudaron al terrorismo en Chile. Me basta con el testimonio de un GAP de Allende.


Y buscando en internet he encontrado que Olof Palme estimaba a Fidel Castro como "un buen amigo". Entonces, su preocupación no era defender la democracia: su preocupación era ayudar a la izquierda, por dictatorial que fuera. O terrorista que fuera, porque Fidel Castro era el padre material y espiritual del terrorismo en Chile, tanto que hasta hoy no se puede ubicar a uno de los asesinos de Jaime Guzmán que andan prófugos, Palma Salamanca, aunque se ha interceptado llamadas suyas desde Cuba.


Doña Eva Zetterberg ha conseguido la firma del Embajador de la Unión Europea para otra carta a "El Mostrador", diciéndole algo insólito: que no debe publicar cosas mías. Así es que Mirko debe estar muy asustado. Le han dicho que cómo es posible que haya publicado un blog donde cuento lo que leí en los '80 y que haya calificado como "justicia divina" el asesinato de Palme, que eso es una blasfemia. Y el Embajador de la UE, más encima, le dice que tiene las firmas de todos los demás Embajadores de la Unión Europea que, por quebrada que esté, es siempre un enemigo poderoso. Por eso titulé que esto es un ataque europeo en masa. Pero, salvo que reciba un impacto directo en la cabeza, nadie me va a sacar de ella que yo leí que Olof Palme contribuyó a la colecta del FPMR a principios de los '80.


Lo notable es que en Suecia una enorme lista de organizaciones marxistas de chilenos residentes allá ha sacado una declaración en contra mía por haber leído lo del aporte de Palme a la colecta y haberlo escrito en este blog. Pero, díganme, ¿qué puedo hacer, si así lo leí? ¿Qué culpa tengo yo de que no se me haya olvidado? ¿Y cómo quieren que no escriba las cosas que recuerdo?


Otra cosa notable es que el mayor motivo de escándalo, a juicio de Eva Zetterberg y su cohorte de Embajadores, es que yo haya calificado de "justicia divina" el hecho de que un terrorista haya asesinado a Olof Palme. Además, dicen, eso es falso, porque no fue un asesinato terrorista. Pero tengo que explicarle a la Embajadora sueca en particular y a los Embajadores europeos en general dos cosas: la primera, que es una costumbre chilena decir "justicia divina" cuando a uno le hacen lo mismo que uno le ha hecho a otro. Para cualquier chileno era obvio que Palme apoyaba a los terroristas, si no por el aporte a la colecta del FPMR, por considerar buen amigo al padre de todos los terroristas, Fidel Castro, y por permitir que una Embajada que estaba bajo su responsabilidad entregara muchas armas al MIR. Porque Max Marambio asegura en su libro que fueron muchas.


En cuanto a que dispararle a un político sin un motivo claro sea calificado como acto de terrorismo, eso no puede ser calificado de falso, como lo hacen la Embajadora y todos sus colegas. Cuando agentes del Gobierno Militar acá mataron a terroristas, los países europeos eran los primeros en decir que era "terrorismo de Estado". Por supuesto, no se lo dicen a Obama, cuando hace lo mismo, ni a Netanyahu, porque, vamos, ¿en qué mundo vive usted?


Y hasta hubo un periodista sueco que dijo que Thieme, que era yerno de Pinochet cuando mataron a Palme, había sido el autor de los disparos. Oyendo a Thieme ahora uno sabe que habría sido imposible, porque resultó ser más izquierdista que Palme. Pero si hubiera sido cierto el cuento del periodista sueco, todos habrían acusado de "terrorismo de Estado" a Pinochet por mandar a su yerno a matar a Palme.


Bueno, Eva, seamos amigos. Compréndeme, yo sé lo que leí en los '80 y estoy seguro de que Palme contribuyo a la colecta del FPMR. Y cuando digo "justicia divina", no es que sostenga que Dios es un tal por cual que mandó a matar a Palme, sino que es un modismo chileno. Dile a los demás Embajadores que no amenacen a "El Mostrador", cuyo director debe estar muy asustado. No es culpa suya. Él aprovechaba de publicar este blog para vestirse un poco de imparcialidad y de que daba cabida a todas las opiniones. Ahora se va a quedar sin una de derecha, debido a la amenaza de ustedes, que es un atentado a la libertad de prensa que, estoy seguro, el Colegio de Periodistas va a aplaudir, porque es más zurdo que Palme y hasta me ha sumariado por publicar cosas contra otro izquierdista. Pero eso no es grave para "El Mostrador", porque tiene a la Tere Marinovic, que piensa bastante parecido a mí y ustedes todavía no la han vetado.


Eva, si me llega alguna noticia del aporte de Palme a la colecta, te aviso por este mismo medio. Y muchos saludos en estos felices 40 años de lo que todos sabemos.
  


El 11 de septiembre de 2013se inauguró en Caleta La Arena, km. 40, Carretera Austral, un monolito en recuerdo de la Gesta Libertadora del 11 de septiembre de 1973, que encabezara el General Pinochet, rememorando la construcción de esta gigantesca obra vial que unió por tierra e integró a una parte importante de nuestro territorio austral






No hay comentarios:

Publicar un comentario