Derechos humanos o humanos sin derechos.

Derechos humanos o

humanos sin derechos.

Millones de palabras, y un incalculable rio de tinta, se ha utilizado para vociferar sobre los derechos humanos, cosa buena por cierto, pero, lamentablemente el tema lo han politizado de tal manera que se ha transformado en una burla para quienes realmente creemos que todos los seres humanos tienen derechos inalienables.

Una de las curiosidades de los “dueños del tema”, nos referimos a esas izquierdas que creen que les pertenece, discriminan entre seres que tienen derechos, siempre sus amigos, y aquellos que no tienen ningún derecho, que corresponden siempre a aquellos que por su accionar o sus ideas están en la vereda contraria a ellos.

Un ejemplo ilustrador es el del terrorismo, ese que ataca desde las sombras a seres inocentes y a las Autoridades, al que defienden a raja tabla y consideran que los castigos que les impone la Justicia sin injustos y absurdos, pero, para quienes han tenido la obligación de combatir a esta lacra de la época moderna exigen las penas del infierno.

Así hemos llegado a que la Ley de Amnistía dictada por el Gobierno Militar fue buena para dejar en libertad a todos los secuaces de sus afanes totalitarios, con los que pretendían aherrojar las libertades de los chilenos, pero consideran inaceptable que se use para terminar con los grotescos procesos a los que se somete a los uniformados que les combatieron.

Nuestra legislación establece que hay circunstancias atenuantes, extinciones de culpabilidades que se consiguen con el paso del tiempo, beneficios intrapenitenciarios que son rigurosamente reclamados cuándo benefician a algunos de los suyos, pero que, contradictoriamente, son rechazados y desprestigiados cuándo pueden beneficiar a sus adversarios.

La aplicación de Leyes internacionales, que no estaban vigentes en Chile al momento de los hechos que provocan las sanciones perseguidas, y que ni siquiera han sido ratificadas al momento de usarse, la irretroactividad de la legislación, en beneficio pro reo, son algunas de las irregularidades que existen en estos inicuos procesos.

Llevamos más de 20 años con un sistema Judicial convertido en rehén de las posiciones ideológicas de algunos Magistrados o secuestrado por la gritería con que estos defensores de los “derechos humanos” quieren eternizar una venganza miserable contra quienes proporcionaron la primera derrota internacional al imperialismo rojo de la ex URSS.

Han pasado más de 20 años en los que el falseamiento de nuestra historia ha sido completo, transformando a quienes nos devolvieron las libertades en parias de nuestra sociedad y a aquellos que trataron de arrebatarnos por la fuerza las emancipaciones obtenidas en duras luchas en verdaderos santones de la defensa de la democracia que ellos abominan.